miércoles, 2 de septiembre de 2015

SEPTIEMBRE: EMPEZAMOS...

Ha empezado septiembre y el wathsapp ha empezado a echar humo: " ¿ Quién sale esta tarde ?, ¿ a qué hora quedamos ?, ¿ dónde ?... Unos y otros vamos  respondiendo y quedando para salir a correr un rato. Nuestros senderos se empiezan a llenar de runners que vuelven a retomar sus horarios habituales de entrenamiento que empiezan a preparar las primeras citas del calendario de esta temporada que, para unos comienza ahora y , para otros, es una continuación de la ya iniciada con el año en curso.
Por delante nos quedan las citas habituales de, entre otras,  Asperillas, Portezuelo, Talavera, Riberos del Tajo, Trujillo, Jarandilla, Navalmoral... y alguna nueva que, seguramente, iremos a conocer, para terminar el año con nuestra San Silvestre Jaraiceña.

Y,como ahora no hay mucho que contaros, os voy a dejar con un artículo de carreraspopulares.com, de Luis Miguel del Baño, en el que se nos dan una serie de consejos para salir a correr a horas tempranas, en el caso de que no podamos hacerlo en otro momento:

Vuelve septiembre: consejos para salir a correr bien temprano

Si eres runner alguna vez, o prácticamente siempre, te habrá sonado el despertador a horas intempestivas. Te habrás levantado aún con noche cerrada y, mientras tu familia se queda en la cama plácidamente descansando, tú habrás ido a pegarle a la zapatilla. Es un hábito muy bueno, siempre y cuando seas capaz de poder compaginarlo con tu vida diaria y, claro está, siempre y cuando seas capaz de luchar contra el sueño que puede que tengas de buena mañana.
En determinadas épocas, el sueño se puede hacer todavía más poderoso y, o bien, vencernos la partida y que no podamos levantarnos a cumplir con nuestro entrenamiento, o que tardemos en activarnos más de la cuenta y comencemos a correr sin estar aún ‘despiertos’ al 100%. Una de esas épocas coincide con el final de las vacaciones. Si hemos de sumar a la vuelta a la rutina y los cambios de horarios un madrugón extra para salir a correr, se nos puede hacer muy cuesta arriba.

Para activar al cuerpo y obligarle a ponerse manos a la obra, puedes ayudar con algunas pequeñísimas pautas muy simples al sistema nervioso autónomo, que es el encargado de regular nuestras acciones involuntarias. Este sistema actúa sobre los vasos sanguíneos, músculos o glándulas y regula nuestros procesos vitales. Es decir, es el sistema que nos transporta desde el estado somnoliento hasta el estado activo.
Sabiendo esto, de vez en cuando le puedes echar una mano para activarte con algunos sencillos trucos y así empezar a entrenar con tus órganos y el sistema nervioso bien preparados para la acción, de manera que tu rendimiento sea el óptimo.



- Ducha fría. Vale que lo habrás visto en infinidad de películas. Pero funciona. Acabar una ducha rápida con agua fría nos activa el sistema simpático del cuerpo. Es, básicamente, el que nos prepara para la acción. Regula nuestras acciones involuntarias. Es el que actúa, por ejemplo, cuando estamos en peligro y nos predispone para la huída o un enfrentamiento. Si lo activamos del todo antes de salir a correr, ya habremos recorrido un buen camino. Claro está, esto te obliga a meterte en la ducha antes de entrenar. Lo puedes sustituir por un buen enjuague de cara con agua fría.

- Varía tu desayuno y prueba un sabor nuevo y extraño. La monotonía del desayuno genera que el cuerpo lo tome como un acto mecánico. Si, en lugar de todos tus clásicos alimentos de siempre, introduces algo a lo que el cuerpo no esté acostumbrado, reaccionará ante eso. Por ejemplo, un poco de zumo de limón o cambiar un día las tostadas con azúcar por tostadas con aceite y sal. Eso sí, asegúrate que sean cosas digeribles y que no te sienten mal.

- Por la noche, visualiza tu mañana. Cuando estés con la cabeza sobre la almohada antes de dormirte, visualiza las acciones que llevarás a cabo cuando te levantes. Recuerda dónde te has dejado la ropa de correr, qué harás primero, si ir al baño o cambiarte de ropa, piensa si harás unos estiramientos o calentamiento en casa, por ejemplo. Una vez levantados, vuestra mente se activará tratando de recordar, casi de manera involuntaria, esa lista que os dejasteis pendiente la noche anterior. De esa manera, evitaréis que ejecute acciones de manera automática, el cerebro estará obligado a trabajar.

-Rompe las acciones mecánicas y busca algo que te obligue a hacerte preguntas. Como os pasará a muchos de vosotros, tenemos muchas acciones mecánicas grabadas que, prácticamente, no nos obligan a estar despiertos para realizarlas. Por ejemplo, coger las llaves del coche siempre del mismo sitio antes de salir de casa, o al abrir la nevera saber en qué estante está tu desayuno y cogerlo sin más. Si la noche anterior cambias tu desayuno de lugar o mueves las llaves del coche a un sitio diferente, por la mañana tu mente lo recordará y si no lo hace, estará obligada a hacerse una pregunta y a buscar la respuesta, es decir, a activarse.

- Un truco extra. No activará ninguno de tus sistemas nerviosos y puede que incluso te arrepientas, pero es el truco más viejo del mundo si quieres obligarte a levantarte. Pon el despertador fuera del alcance de tu mano. Cuando empiece a sonar esa desagradable alarma, estarás obligado a levantarte y caminar para apagarlo. Ahí ya lo habrás conseguido. Estarás de pie. Solo tienes que calzarte y ¡a entrenar!
Por cierto, ¿ se levantará temprano Linsley cuando sale a correr ?
Saludos a todos y nos vemos por esos caminos y carreteras. 

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