El espidifén, la parabólica y el poeta.
A las 07,50 h. de la mañana del domingo 23 de noviembre suena mi "guassá". Es el amigo Pirchu anunciándome el lluvioso día que teníamos por Jaraíz y que, presumiblemente, íbamos a tener en Jarandilla. Me asomo a la ventana y veo que está lloviendo con ganas. Entro en internet y me entra un cierto alivio al ver que por Jarandilla ponía " menos agua " y que, a la hora de la carrera, apenas llovería.