CRÓNICA M.MARATÓN DE MÉRIDA

De puente a puente y corro porque me lleva la corriente.

No podemos sino que de calificar como ESPECTACULAR el gran día que hemos pasado, con motivo de nuestra participación en el IX Medio Maratón de Mérida. Con razón está considerado como de los mejores medios maratones de los que se disputan en España y por ello los 1.300 dorsales se agotan en pocos días. A la belleza del recorrido se une una excelente orgranización y el buen ambiente que se vive en cada kilómetro de la prueba, con las calles llenas de gente, con una ciudad totalmente volcada con su carrera.

A las 7,45 de la mañana habíamos quedado en la Plaza de Santa Ana, Susi Gil, Juanjo Santos, el primo Alfredo, el compadre del presi, uséase, César, que es de Majadas, y el que suscribe, J.J. JesPil. Tras la foto de rigor, partimos hacia la capital extremeña haciendo una paradita para desayunar en un conocido restaurante de la autovía A5. Poco después de las 9,40 h., de una calurosa mañana de domingo, aún en invierno, llegábamos a la, antiguamente llamada, Emérita Augusta. En el Pabellón Guadiana nos esperaban Javi " Vete ", Germán, Timón y el amigo Migue " Labra ", que nos había recogido los dorsales la tarde anterior. En total, nueve lanchacabreros íbamos a ser de la partida en esta edición del medio maratón emeritense. Una pena que el Presi y Pirchu, por diversos motivos, no hayan podido acompañarnos, pese a estar inscritos.

Tras saludar a muchos conocidos,y como hacía una excelente mañana,nos fuimos a cambiar. Al lado del coche, unos bancos nos sirvieron de improvisados vestuarios en plena calle. Enseguida el ambiente se empezó a cargar del olor de los ungüentos que el personal empezó a refregarse: alcohol de romero, radio-salil y pomadas diversas para las dolencias que cada uno dice arrastrar e, incluso algunos hicieron de masajistas de sus compañeros. El cuadro era de exposición. Una vez guapos y acicalados nos dirigimos a la zona de salida donde el amigo Santos nos dirigió un intenso calentamiento.

Se acercaba la hora y nos fuimos ya hacia el arco de salida. Y aquí se dio uno de los pocos fallos que la organización cometió: el arco estaba unos cien metros por delante de la zona de control de chips por lo que nos hicieron a todos que nos moviéramos hasta detrás de esa zona, provocándose un pequeños caos, que algunos pagamos con una muy mala colocación para la salida.

Unos minutos después de las once la mañana se dio la salida a esta espectacular carrera en la que tomamos parte 1.300 atletas llegados de muchos puntos de Extremadura, otras comunidades españolas y Portugal, con una temperatura que rondaba los 20º y bajo un sol de justicia.

Como digo, la salida fue un tanto caótica ya que al no estar en su sitio el susodicho arco, no tuvimos una referencia clara donde colocarnos, y, algunos cometimos el error de ponernos demasiado atrás por lo que nos costó bastante el ir adelantando corredores hasta imponernos el ritmo adecuado de carrera. 

Nada más salir, cruzamos el conocido Puente de Lusitania, flanqueados por unos erguidos legionarios, con Susi por delante y seguido por Santos y Labra. Muy cerca de ellos el primo Alfredo que no quiso desgastarse en exceso sabiendo de los problemas estomacales que arrastraba todo el fin de semana. Por detrás de estos compañeros marchábamos el resto, Timón, Germán, Javi, JesPil y César. Enseguida alcanzamos el km 2, situado en el paso del imponente Puente Romano de 792 metros de largo. En el km 4, cruzamos otro de los puentes de la ciudad, el Puente Fernández Casado, que nos deja a los pies de la Plaza de Toros y de La Casa del Mitreo. Por esta zona, la carrera es cómoda y se corre rápido. Entre el Km 6 y el 7 pasamos por el Circo Romano, testigo de innumerables prueba atléticas hace más de dos mi años. Por aquí, Santos y Labra habían sobrepasado a Susi que va, prácticamente, a la par con Alfredo. Por detrás, todo más o menos igual.En el km 8 tenemos un repecho que nos va a llevar a la zona centro de la ciudad pasando por la Basílica de Santa Eulalia, patrona de Mérida. Continuamos recorriendo los lugares más emblemáticos de la capital de Extremadura y nos adentramos bajo uno nos de las arcadas del impresionante acueducto de Los Milagros. Aquí somos recibidos por un gentío increíble y con la animación de un grupo de tambores y de personas ataviadas con trajes de la época romana. Estábamos en el Km.10 y nos dieron el segundo

avituallamiento de la jornada. Habíamos llegado al ecuador de esta bonita carrera. Y si atrás habíamos dejado el acueducto de Los Milagros, ahora teníamos delante el de San Lázaro. La pena era no poder dedicar a estos monumentos el tiempo que se merecían, pero para eso ya habrá tiempo en otra ocasión. Con varias subidas y bajadas, dejando a una lado el puente de hierro del ferrocarril, llegamos nuevamente al Puente Lusitania que nos llevó hasta la dura subida del km 14, que, al menos algunos, no nos esperábamos. Santos y Labra seguían dando zapatilla. Alfredo y Susi, que no estaban para tirar muchos cohetes, se impusieron un ritmo,más o menos cómodo. Más atrás, Javi y JesPil se quedaron solos pues, Germán, que también andaba renqueante y Timón, no les siguieron. César, sin pausa pero sin prisa continuaba haciendo su carrera. Otro paso por el Puente Romano en el km 16 que nos hizo recuperar tras una rapidisima bajada. Aquí, el estómago del primo Alfredo se " enfadó " y a punto estuvo de jugarle una mala pasada. Tuvo que pararse en dicho puente poco más de un minuto para recuperarse y poder seguir. Ahora, íbamos esperando la parte más dura de la prueba, es decir, la famosa cuesta del kilómetro 18, en la Avda de Lusitania, pero sabiendo que a partir de ahí el recorrido sería ya mucho más suave. Poco a poco íbamos llegando al final de este espectacular recorrido por las calles emeritenses. Pero nos quedaba aún el postre, el esperado paso por el Anfiteatro

y Teatro Romanos y, nada más salir de ellos, el Museo Nacional de Arte Romano. Nos quedaban ya dos kilómetros. Las calles adyacentes a la Plaza de España eran un hervidero de gente animando a los corredores. Aún tuvimos tiempo de contemplar el Templo de Diana antes de encarar el último kilómetro de la carrera. A falta de setecientos metros teníamos al lado la meta, pero aún tuvimos que subir otro repecho más por una de las calles por las que se accede a la Plaza donde, por fin, estaba enclavada la meta.¡ Qué largo se hizo ! Habíamos llegado y habíamos conseguido finzalizar uno de los medios maratones más bonitos de los que hemos disputado, en el que el calor reinante y el exigente recorrido le hicieron también más duro de lo habitual.

Los tiempos empleados fueron:

- Labra:01:31:55
- Santos:01:31:56
- Susi:01:36:42
- Alfredo:01:37:20
- JesPil:01:39:34
- Javi:01:39:34
- Timón:01:39:58
- Germán:01:40:40
- César:01:51:07

Ganó la prueba por octava vez consecutiva el portugués Bruno Paixao que hizo una excelente marca de 01:06:27, superando en un segundo el récord de la prueba. En segundo lugar llegó el talaverano Javier Núñez, 01:11:20, cerrando el triplete de cabeza, J.Francisco Cano con 01:11:46. Destacar también el noveno puesto conseguido por nuestro amigo placentino Daniel Remón Señorán (01:15:48).

En chicas, la vencedora fue Tina María Ramos (01:23:11), seguida de Raquel Trabuco (01:24:58) y de Micaela Patrán (01:25:28 ).

La clasificación en: CLASIFICACIÓN M.M.MÉRIDA

Las fotos en: FOTOS M.M. MÉRIDA
(Gracias Izaskun ). (Fotos de Fernando Vivas.Atletismo Extremadura)

Y nada más  terminar la carrera, cervecita en mano, algunos estiramientos y a darse un paseíto hasta el pabellón, cruzando otra vez el Puente Romano, y a darnos un ducha, eso sí, con agua hirviendo. Después, regreso a casa, no sin antes pararnos a comer en un restaurante, recomendado por Susi, en la localidad de San Pedro de Mérida que recomiendo a todo el mundo. ¡ Vaya menú ! Yo todavía tengo la comida dándome vueltas.

En cuanto a la organización, salvo el pequeño error de la salida, bastante bien para tratarse de una prueba de esta envergadura. Buena bolsa del corredor, cervezas, fisios, guardarropas, duchas, voluntarios, etc. Lo que sí es criticable es que no nos quisieron entregar la bolsa del corredor de aquellos compañeros que no pudieron ir, pese a haber pagado religiosamente la inscripción. Eso no está bien.

Ahora, a pensar en las próximas carreras. El próximo domingo los montañeros se irán a Montánchez a participar en la I Carrera de Montaña " Sierra de Montánchez y Tamuja ".

Otros seguiremos entrenando para seguir preparando nuestra participación en el I Medio Maratón de Badajoz el día 22 de marzo, la III Carrera de la Orquídea de Almaraz, que organiza el amigo Víctor Luengo o la IX Carrera por Montaña "Sierra de Tentudía" en Cabeza la Vaca.

Y por supuesto, todos pensando ya en la V Edición del Cross Popular-Solidario " camino de la Ermita de la Dehesa " que celebraremos en Jaraíz el día 28 de marzo y cuyas inscripciones continúan abiertas.

En fin, no os canso más. Os dejo que la Diosa Nika os dé sus bendiciones.


Como siempre, ha sido un honor volver a representar a este club tan serio.

Saludos a todos y nos vemos por esos caminos y carreteras.