CRÓNICA DE LA 20ª MEDIA MARATÓN DE LISBOA

¡¡Lo hemos conseguido!!, ¡¡el Club Deportivo Lanchacabrera ya es internacional!!. Hemos conseguido ir una nutrida representación del Club hasta Lisboa y correr la Vigésima Edición de la Media Maratón y ¡¡lo hemos conseguido!!, gracias a la facilidad de convivencia que tenemos entre todos nosotros y nuestras familias, a las ganas de colaborar todos juntos para que esto siga adelante, y sobre todo a las ganas de pasarlo todos bien, teniendo el atletismo como excusa.

La verdad, es que todo ha sido mucho mejor de lo que habíamos previsto: el viaje, los bungalows donde nos hemos alojado, el tiempo, las visitas por Lisboa, etc., aunque como es lógico, encontrándonos con las dificultades propias de ir a un sitio desconocido y además con un idioma distinto, pero en cuanto aprendimos que "obrigado" quiere decir gracias (y no que te pongas un tres cuartos), que café solo se dice "dedal" y que 386 escaleras "elevatore de Santa Justa", todo empezó a ir sobre ruedas, ruedas como las de los tranvías, que por lo visto cuando se entra en un grupo numeroso no se abona el billete.

Si dijéramos que el día de la carrera fue como en todas las demás, mentiríamos. Imaginad a 5 individuos a las 8.30 horas de la mañana, en pantalón corto, con camiseta naranja y una botella en la mano con un líquido de color extraño, andando solos por las calles de Lisboa. Como decíamos, parecíamos presos de Guantánamo, llevando la orina en la botella para ir a los análisis.

En fin, hasta que cogimos el bus y nos soltó a unos 10 minutos andando de donde estaba la salida, pero en vez de 10, tardamos como 30. ¡¡Qué gentío!!. Los "guardiñas" nos iban conduciendo como al ganado, apretándonos con las vallas hasta que desembocábamos en la explanada que da acceso al famoso puente de 25 de abril.

Impresionante la cantidad de gente que había, ¡y pensar que nosotros nos creíamos locos por ir a correr!. No os imagináis la cantidad de colgados que nos encontramos, desde abuelos que intentaban levitar haciendo posturas imposibles, hasta extraterrestres que realizaban la danza del sol delante de los altavoces, e incluso un representante de Cabo Verde, usando una innovadora técnica de calentamiento con un globo en la mano.

En fin, que se nos pasó la hora que teníamos que utilizar para calentar viendo a la gente que estaba a nuestro alrededor. Y en este caso, en vez de cohete que diera la salida, nos pusieron el semáforo del puente en verde y ¡hala!, a ANDAR, pues era imposible correr, hasta más o menos el primer kilómetro.

El paso por el puente, algo realmente impresionante, no sólo por la cantidad de gente que nos rodeaba, si no por la magnitud de todo lo demás, la vista del Tajo, el puente en sí, etc..., en fin, una maravilla.

A partir de aquí, todo normal, hasta que en el kilómetro 5 vemos venir por el sentido contrario los coches que marcan la cabeza de carrera, y cual centella, vemos pasar a Tadesse (el corredor de Eritrea que finalmente ganó y consiguió el record del mundo de Media Maratón en 58,22 y se embolsó ni más ni menos que 50.000 €) que ya iba por el km. 12; ¡¡ya nos sacaba 7 kilómetros!!; y a unos 300 metros, le seguía Chema Martínez. Da gusto ver correr a esa gente.

Pero bueno, nosotros a lo nuestro, yendo a un trote cochinero toda la carrera que se hizo comodísimo.

Fueron pasando los kilómetros, con avituallamientos de agua y bebidas isotónicas y fruta cada 3 ó 4 km. (de lujo) y la meta con el Monasterio de los Jerónimos de fondo; un espectáculo, aunque como siempre, los últimos metros se hicieron un poquito largos.

Los cinco miembros del Club Deportivo Lanchacabrera, tras cruzar la línea de meta, nos fundimos en un abrazo interminable y superemocionados, por haber conseguido terminar otra Media más sin ningún problema, acordándonos en ese momentos de todos los demás "lanchacabreros" que por unos motivos o por otros no habéis podido venir; pero esta vez sin las familias, pues les fue imposible vernos en la línea de llegada gracias al caos permanente que reina en la ciudad de Lisboa y más en ese día, aunque evidentemente, pudieron vivir muy de cerca el espectáculo que supone una carrera con alrededor de 35.000 participantes.

De nuevo, cual ganado, nos fueron trasladando entre vallas hasta que finálmente logramos la libertad y así pudimos juntarnos con los nuestros en el monumento a los Conquistadores, que bien parecía hecho en nuestro honor, y emocionarnos de nuevo al verlos.

Terminamos en Lisboa como empezamos, comiendo en la playa, pero algo más finamente que cuando llegamos el viernes.

Finalmente, comunicaros, que reunidos en Asamblea, en la provisional Sede Social del C. D. Lanchacabrera en Lisboa (bungalow de Jesús Gil), se aprobó por unanimidad que nombramos como patrón del Club a "SAO JORGE", que el día de celebración del mismo será el 25 DE ABRIL y que en principio (pero sujeto a modificación), el emblema de Club será el 2 DE OROS.

Las fotos las iremos publicando en una carpeta que se creará al efecto cuando tengamos todas y se haga una selección del reportaje que tan amablemente nos ha realizado la familia Hernández-Mateos que ha tenido la deferencia de acompañarnos en este viaje inolvidable.

No olvidaos de conservar las tarjetas verdes de transporte público que nos serán muy útiles en la 21ª edición de la Media Maratón de Lisboa, y los que vengáis nuevos el próximo año, no os preocupeis que tenemos para todos.