lunes, 17 de noviembre de 2014

CRÓNICA II MEDIO MARATÓN DE TRUJILLO

Como el reportero habitual del club no puede asistir a todas las carreras que a él le gustaría, ésta vez ha sido el primo Alfredo el autor de esta entretenida e interesante crónica del II Medio Maratón Ciudad de Trujillo., celebrada el pasado domingo día 16 de noviembre.

Seguro que os gusta.


COÑO…, ¿ESO QUÉ ES?, ¿UN DRON?
En esta ocasión fue la Ciudad Monumental de Trujillo la que nos había convocado a participar en su II Media Maratón. A la cita acudimos puntuales y elegantes como pinceles con nuestro nuevo chándal, Javi, que se acercó desde Castañar de Ibor, Juanjo Santos, Jesús ( sustituyendo a Labra ) Dionisio y Alfredo, acompañados por Mari, Reyes y la pequeña Ana, que hicieron las labores de reporteras gráficas y animadoras entregadas.
Buen ambiente en la Plaza Mayor trujillana. Allí, entre emblemáticos palacetes, iglesias y casas señoriales, estaba situado el punto de encuentro de corredores y aficionados. Retiramos los dorsales, la bolsa del corredor, repartimos saludos entre la buena gente habitual en este tipo de carreras y, sin tiempo para más, buscamos un banco donde cambiarnos.
A esa hora, una temperatura fresquita y el cielo cubierto en lo alto, generaba dudas en la decisión de qué indumentaria usar para la carrera. Hubo de todo, desde valientes chicarrones del norte (de Extremadura) que corrieron a pelo en tirantes, hasta frioleros que tiraron de técnica de manga larga y GUANTES. Posteriormente, ya durante la carrera, despejó el cielo, quedando una temperatura excelente para correr.
A las 10:30, en presencia del homenajeado Juan Mateos Broncano, bajo la atenta mirada del conquistador Francisco Pizarro, se dio el pistoletazo de salida a una bonita carrera. A partir de ahí, lo habitual. Dionisio zapateando como si le persiguieran los señores de Hacienda. Más atrás, vamos juntos J.J. Santos, Pirchu y yo. El señor tesorero del club decide tomárselo con tranquilidad, a la espera de comprobar si las pastillas recomendadas por Timón van a conseguir acabar con sus temidos calambres.
En nuestro grupeto, Juanjo nos impone un ritmo endiablado durante los 4 primeros kilómetros. Hasta ese momento, la media es de 4:15 y eso no puede ser bueno. A ritmos más razonables, de poco más de 4:20, avanzamos camino de los 10 kms, hasta que los problemas estomacales que lleva sufriendo Juanjo toda la semana aparecen de forma severa y le impiden continuar con normalidad. Bajamos el ritmo, pero ni siquiera así le es posible aguantar y se queda. La idea de abandonar está rondando su cabeza pero decide continuar (una moza con maleta en el lugar adecuado, en el momento justo, tuvo parte de culpa). Yo, por mi parte, no sé qué hacer. Es el km 11 y voy solo, me encuentro bien, puedo seguir como hasta ese momento o apretar y que salga el sol por Antequera. Me echo la manta a la cabeza y zapateo con ganas hasta el 18, cuando me abandonan las fuerzas y mis patas dicen basta. Otra vez la sensación de vacío y sufrimiento que había olvidado en las últimas carreras.
Toca apretar los dientes y penar hasta la línea de meta. Mientras, Juanjo, no sólo no ha abandonado sino que ha recuperado buenas sensaciones y vuelve a marchar ligero. A Dionisio también se le hace largo el final de carrera y sus piernas se quejan por las cuestas subidas hace sólo siete días en Portezuelo. Jesús, por su parte, que ha ido a un ritmo constante toda la carrera, sufre como todos y deja ir a Juanjo cuando éste le alcanza tras su recuperación. Mientras, a Javi se le ve fuerte y va feliz como una lombriz porque no ha tenido noticias de los malditos calambres (el doctor Timón, que sabe mucho…). Va tan contento que no se da cuenta de que ha perdido el chip de su dorsal, probablemente por una ráfaga del viento de costao que sólo a él ha castigado.

Nuestros tiempos: Dionisio 1:30:40, Alfredo 1:33:50, Juanjo 1:35:27, Jesús 1:35:49: y Javi 1:40 (ni a Jesús, ni a Javi, les busquéis en la clasificación pues no aparecen, uno por Labrador y otro por despistado y llegar sin chip).
Como dije al inicio, una bonita carrera,
Muchas gracias por todo.Bien organizada y señalizada, con multitud de voluntarios en los cruces y puestos de avituallamiento, digna bolsa del corredor, buen ambiente y actividades variadas en la Plaza Mayor, y un recorrido llevadero sin cuestas ni pendientes significativas. La primera, además, en la que veo un dron grabando el esfuerzo de los sufridos corredores. Un puntazo. Una prueba que merece la pena cuidar y tener en consideración, que esperemos se consolide en el tiempo.
Y como no todo es correr, tras los bailes de salón y participar en la sesión de zumba con las chicas del gimnasio trujillano, fuimos al Medievo, donde el camarero, con raíces jaraiceñas, nos sirvió unas ricas cervezas (bueno, unas cervezas y un aquarius para alguno) con unos generosos pinchos. Había que reponer las energías gastadas en la carrera…
La clasificación en: CLASIFICACIÓN II M.M. TRUJILLO

Las fotos en: FOTOS M.M. TRUJILLO
Una carrera más en la que ha estado presente este club tan serio.

Y ahora, a pensar en la próxima: el Medio Maratón de Jarandilla, con su famoso " Cerro Pino " y la subida al Guijo. Como la prueba empieza a las 10,00 horas, la salida de Jaraíz será a las 08,45 h. desde la Plaza de Santa Ana.
En fin, últimamente con la inscripción de las carreras dan cosas muy raras. Si el otro día en Portezuelo fue la entrada a una visita guiada a sus sensuales mazmorras, ésta vez en Trujillo, nuestros compis dicen que fueron a ver una exhibición de zumba, pero en realidad lo que presenciaron fue un espectáculo de las  llamadas " Chicas Doradas ", famosas en el país que conquistó Pizarro y que ahora son ellas las que están conquistando al mundo. No me extraña que al conquistador extremeño le gustaran tanto aquellas benditas tierras.
Saludos a todos y nos vemos por esos caminos y carreteras.

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