CRÓNICA " SUBIDA A LA ERMITA " DE CORIA.

Amigos. Ésta vez no somos ninguno de los habituales los que hemos escrito la crónica de esta carrera. En esta ocasión el que ha debutado en estas lides ha sido SERGIO GIL, el lanchacabrero más joven del grupo y, lógicamente y con el permiso de su papá, el que, en un futuro no muy lejano, más alegrías nos va a dar, ya que, si continúa con la ilusión que tiene, sus magníficas aptitudes, el apoyo de su familia y si la " cabeza " no le traiciona ", tendremos un CAMPEÓN  a la vuelta de la esquina. Y si a eso unimos que todo lo que tiene de alto lo tiene también de buena persona, seguro que lo conseguirá. Desde estas líneas, todos te deseamos lo mejor.

Bueno, y para que veáis lo que dan de sí cinco kilómetros, os dejo con su extensa y detallada crónica.

Como desde que llevo en el CD. Lanchacabrera, aún no me había mojado en hacer una crónica y como en esta vida, siempre hay una primera vez, ésta es la mía . 

Bien amigos , pues a pesar de por algunos acontecimientos, mi padre ( el llamado tigre ) con el que siempre voy a a todas las carreras, esta vez no me puedo acompañar, al igual que otros miembros del club por ciertos motivos y a pesar de saber que era el único que iba del club, decidí participar, ya que tenía muchas ganas de correr esta carrera.

Bueno a lo que voy, que me enrollo .

A las 8:00 de la mañana del domingo me desperté , desayuné. Lo primero, un cafetito y una tostadita. Le hice caso a Jespil, que me decía el otro día entrenando que era un buen desayuno antes de la competición. A continuación me vestí, me coloqué unos cositas que me faltaban que coger , preparé unas drogas( isostar) no pensemos mal y sobre las 9 decidí ir hacia Santa Ana donde había quedado con Ivan y Pacheco del Club Hispania. Llegué a Santa Ana, miré al cielo y vi que estaba nublado. Pensé, “espero que no llueva “, pues llevaba tirantes para correr. A cabo de 5 minutos llega Iván , nos saludamos, buen rollo y un poco más tarde llega Pacheco, al que también saludo.Metimos los bolsos en el maletero y nos fuimos rumbo hacia Coria. Por el camino fuimos hablando de carreras anteriores, cercanas a hoy, y de cómo sería la carrera que íbamos a disputar esta mañana. Yo la conocía y les hablé de ella. Les comenté, simplemente, que era una carrera muy explosiva. Al cabo de unos 45 minutos, y con muy buen rollo en el viaje, llegamos a Coria , buscamos sitio y aparcamos. Nos dirigimos hacia la salida para recoger el dorsal y yendo hacia ella nos dimos cuenta que había buenas liebres ,había buen nivel. En la zona de salida recogimos el dorsal , y,¡ qué suerte ¡, ja,ja, pues me tocó mi numero favorito, el 3. ¡ qué contento ¡ Allí nos encontramos con nuestros paisanos y amigos Antonio y Dionisio, de Cuacos de Yuste, con sus respectivas mujeres e hijas. Saludamos a Teo, el amigo de Dani. Le comento a Iván que vaya nivel que hay, que esto es para verlo de espectador y quitarte el dorsal. Estando allí me di cuenta de una cosa que siempre mi padre habla conmigo y con vosotros lanchacabreros, y es que hace unos años mi padre decidió correr esta carrera por primera vez. Eran unos 50 atletas y este año ya somos 166. Es una burrada lo que crece el rúnning cada año. Vaya fiebre. Y eso que hace nada decíamos que correr es de cobardes. Yo pienso que los cobardes éramos nosotros, a la vez que un poco bobos por no haber descubierto este deporte tan magnífico antes, y con los grandes amigos que haces en él. Bueno tras saludar a ciertos atletas conocidos , nos dirigimos al coche a cambiarnos pues se nos echaba la hora encima. Le digo a Iván que si está aquí mi amigo Jespil le da algo por lo mal que íbamos de tiempo. Llegamos al coche, nos pusimos nuestra ropa de batalla y nos calzamos las zapatillas. Mientras Pacheco estiraba, Iván se tomaba sus vitaminas y yo preparaba mi bebida isotónica .Una vez preparados , Iván y Pacheco entraron en un bar para tomarse un café y yo esperé nervioso fuera . Después, empezamos a calentar. A los 10 minutos empezamos a sudar ¡ qué calor ¡ y ¡qué nivel había ¡. Increíble. Nos dimos cuenta que la hora estaba llegando así es que nos dirigimos hacia la salida. 

A las 11, todos preparados y dan el pistoletazo de salida. Salí fuerte, detrás de Iván. Detrás de mí venía Pacheco , conteniendo las fuerzas, ya que era todo bajada y había que reservar. Iván se me fue unos metros y me fui detrás de Dionisio. Pacheco se quedó un pelín más retrasado. Pasamos el km 1 en 3,45. Pensé, “ madre mía, a qué ritmo vamos”,  pero me encontraba genial. Pasamos por fincas al lado del rio; la gente dando ánimos.En el km 2 el crono marcaba 7,30. Voy bastante bien. Me encuentro con un grupete bastante majo en el que iba cómodo por lo que decidí no tirar y reservar un poquitín para la subida final, aunque a ese ritmo era imposible reservar. Tras pasar el km 3 en 11;30 , decidí cambiar de ritmo y me fui a por Vidal, el de Almaraz. Voy con él hasta el km 4.Íbamos fuertes pero me encontraba bien. Llevaba a Iván a 50 metros y a Dionisio delante de mí. Pasamos el km 4 en 15,45. Tras pasar este punto vino una subida de 100 metros, con un buen repecho, así es que, como se me da bien las cuestas, di un tiron. Vidal se me quedó un pelín atrás. De repente llegamos a una bajada increíble. Aquí me dejé caer. Ya divisaba la gran cuesta. ¡ Qué ganas de subirla ¡ Giro en la curva tras la bajada y ahí estaba la increíble subida de casi 300 metros con gran desnivel.

Empecé a subirla y me encontraba bien. Daba las zancadas más grandes. A a 10 metros tenía a Dionisio. Digo “ ¡ a por él ¡ “ y mordiendo el polvo apreté con todas mis fuerzas y empecé a subir encontrándome estupendamente.En la mitad de la cuesta pasé a Dionisio. Como tenía la meta a unos 100 metros apreté aún más,dando todo lo que me quedaba. Me crecí con el publico apretando y animando con sus aplausos. Termino la subida y por fin llego a meta. Miro el crono y veo que he finalizado con un tiempo de 18:39 minutos. Me dije para mis adentros: “ Sergio, estás increíble “.Muy contento por haber bajado de 20 minutos, que era mi objetivo, cojo el agua y una camisa que me dieron. Veo a Iván, que entró por delante de mí en 18:10. Ambos nos fuimos a saludar a Dionisio, a Antonio y Pacheco que llegó con un tiempo de 19: 30. Muy contentos los tres por el tiempo que habíamos hecho, decidimos ir a cambiarnos. Pero resulta que el coche lo teníamos en Coria así es que tuvimos que ir a por él corriendo otra vez por el mismo camino de la carrera pero al revés. Otros 5 kms más, pero no importaba. Como Dionisio también tenía el suyo allí, se vino con Iván y conmigo. Cuando íbamos por la mitad del camino nos encontramos con Teo, que se unió también a nosotros. Nos fue comentando su carrera. Había pasado el km 1 en 2:50. Pensé, “ madre mía, qué bestia “. Fuimos hablando todo el camino con él hasta llegar a Coria. ¡ Qué chico más majo, no le faltaba conversación . Llegamos al aparcamiento y nos despedimos de Teo. Iván y yo nos secamos el sudor , nos cambiamos , nos dimos un respiro y nos volvimos otra vez hacia la Ermita a buscar a Pacheco y para ver si habíamos cogido algún premio. Llegamos a la Ermita. Allí estaba el compañero con Dionisio y su mujer en el bar. Nos tomamos un Aquarius ,charlamos sobre la carrera y, como hasta las 12:30 no era la entrega de premios, nos fuimos a ver las clasificaciones. Miro en absoluta el 6º de 27 y en la general 17ª de 166. No me lo creía. Estaba satisfecho. Le pregunto a Iván y me dice que ha quedado el 4º. Digo, “ ¡ qué putada es quedar cuarto. Díselo a mi padre que al pobre le ha pasado varias veces “. Pero bueno ahora ya no, porque está increíble de forma. Pacheco tampoco tuvo premio. Pero, a pesar de no haber cogido nada y de todo el polen que había allí nos quedamos a ver la entrega de trofeos. ¡ Vaya pódium ¡. Teo, al final, 4º. Un portugués, de 50 tacos, segundo en la general. Tercero quedó Fabián, el que gano Trail de Coria y Montehermoso y vencedor un triatleta que apenas conocía. En fin, subir con ellos al pódium era bastante difícil . Nos despedimos de Antonio,de Dionisio y de su mujer que le apunta y le acompaña a todas las carreras , nos montamos en el coche y partimos rumbo a tierras más conocidas . Por el camino fuimos hablando de la carrera y sobre qué tal nos habíamos encontrado. Yo eché una cabezadita pues estaba cansado . Al cabo de unos 45 minutos llegamos a Jaraíz. Me despedí de los hispanos Iván y Pacheco, cogí mi bolso y me fui a casa pues ya tenía hambre .

Bueno, queridos lanchacabreros, ésta ha sido mi hazaña vivida en Coria. Espero que os haya gustado y no os haya aburrido. Sólo deseo que para lo próxima vez pueda ir acompañado de algunos de vosotros, pues se os echa de menos. No es lo mismo sin vuestra compañía y , en especial,sin la de mi padre , mi compañero de carreras, pues para mi es un orgullo tenerle como padre y yo ser su hijo, y poder disfrutar del rúnning con él, entrenando y corriendo en las pruebas codo codo con codo ,zancada a zancada , kilómetro a kilómetro. GRACIAS PAPÁ por ser como eres .

Un saludo lanchacabreros , ha sido un placer y nos vemos Zapateando . 

Las clasificaciones las podéis ver en : CLASIFICACIONES CORIA.

Algunas fotos en: FOTOS CORIA.

Y como esta crónica la ha escrito un menor, dejaremos el tiramillas, sin que sirva de precedente,  para otra ocasión.